Abocarse a la tarea de crear cómic en la ciudad de Medellín es aún hoy una tarea difícil, pero afortunadamente cada vez más común. Quizás, esto no sea fortuito, en la capital antioqueña han surgido varios de los autores que destacan cuando se habla del panorama del cómic colombiano en los últimos 30 años. Como Álvaro Vélez (Truchafrita), autor de la inagotable Gacetilla Robot y la serie Cuadernos Gran jefe, donde hace una serie de crónicas sobre la vida en Medellín en los años 80 y 90; Marco Noreña conocido por su prolífico trabajo en fanzine y por navegar los escenarios subterráneos de publicación; Pablo Pérez (Altais), quien se ha dedicado al cómic periodístico; Carlos Granda, cuya obra se enmarca en el cómic superheroico y diversos trabajos para editoriales extranjeras; Luis Echavarría creador del laboratorio de historieta La Chimenea y autor de varios cómics autopublicados donde los ambientes naturales se mezclan con lo extraño; Joni B destacado por su historieta Parque el Poblado, una crónica sobre la vida juvenil en uno de los lugares más representativos de la ciudad. Cada uno de ellos encarna, a su modo, una forma de ser historietista y, como confirman nuestros entrevistados, todos han aportado de diferentes maneras a la escena del cómic actual en Medellín.
Asimismo, proyectos antológicos como la revista Agente Naranja, Vinagreta Garbo y el fanzine Sudaka Cómix, influenciados por el cómic underground de España y Estados Unidos, son antecedentes de un oficio que aún se encuentra en consolidación, así también lo demuestran autores como Elkin Obregón, célebre creador de la tira Los Invasores; Carlos Díez habitual colaborador del periódico Universo Centro y autor del álbum La reliquia; Nomás cómics autor con un estilo que se mueve entre la provocación y el realismo sucio; Pablo Marín Ángel (el Señor Juanito), dibujante que mezcla cómics con la música tropical y romántica; Mariana Gil Ríos autora del libro Raquel y el fin del mundo; y Will Zapata creador del fanzine Gatho, quienes en su momento han realizado publicaciones que aún tienen eco en los más recientes lectores y creadores de cómic .
También es de apreciar que en años recientes la ciudad desde sus entes institucionales ha dado una mayor acogida al noveno arte engrosando los espacios dedicados al cómic como las colecciones bibliográficas del Sistema de Bibliotecas Públicas de Medellín y bibliotecas académicas. Así como la inclusión en 2016 del estímulo de Creación en novela gráfica o cómic, el cual ha permitido a Luis Echavarría, Francisco Peláez y Ana López (Cabizbaja) realizar sus primeros proyectos de largo aliento en cómic, y dar continuidad a su carrera como historietistas como es el caso de Pablo Pérez y Lina Flórez (Altais Cómics), quienes trabajan actualmente en su segundo libro gracias a este estímulo.
Trazados estos referentes surge entonces la pregunta por el ahora, ¿cuáles son los autores y autoras que en la última década han empezado a emerger en la ciudad de Medellín? Esta es la duda que al menos en parte, queremos esclarecer. Por ello, creamos el Dossier Nuevos autores de cómic de Medellín, gracias a la Beca para la realización de publicaciones artísticas digitales no periódicas. Esta publicación recoge, a través de 6 entrevistas, 9 voces de historietistas emergentes que con su trabajo están enriqueciendo la escena del cómic de la ciudad.
Para este ejercicio, como siempre sucede con la elaboración de un dossier o una antología, fue necesario seleccionar. Para ello, atendimos a criterios de selección como la constancia y la trayectoria enmarcada en la última década, así como la variedad de formatos de publicación y formas de ver el cómic. Dicho esto, categorías como mejores autores y autoras, o historietistas más talentosos, se escapan de nuestro interés. Este trabajo al igual que cualquier tipo de constelación vista desde un solo foco, es una muestra fragmentada del panorama actual del cómic en Medellín, un par de puntos en el mapa, un intento por agrupar y esbozar algunos de los trabajos de los últimos años, una muestra que sabemos incompleta.
De esta elección se desprende un marco, no para hablar de un tipo de cómic particular al territorio, ni para establecer un canon, sino que da cuenta del sector en crecimiento, que de a poco sale del nicho habitual de lectores, y en el cual se reconocen múltiples estilos, temáticas y preocupaciones estéticas diversas.
Aún así, común a todas las entrevistas están aquellos interrogantes que como colectivo nos interesa rastrear: el cómic en Medellín, las relaciones e influencias locales, dinámicas de publicación y divulgación, opiniones sobre el oficio, planes futuros, y el oficio del historietista en la ciudad, respecto a dificultades y profesionalización. Para establecer así una conversación acerca del oficio en los últimos años y perfilar los distintos estilos, técnicas y preocupaciones que habitan algunos creadores de esta última década. Además de reconocer cómo el escenario se ha diversificado
Sabemos, incurrimos en omisiones y se nos escapan nombres, ya que el encuadre y la selección son apenas una fotografía parcial de lo que se ha dibujado y las entrevistas no alcanzan a agrupar y a darle voz a todas las manifestaciones de cómic que una ciudad como Medellín tiene y ha dado en los años recientes. Entre los trabajos notables que perfectamente hubieran podido conformar una constelación se cuentan: Matildetilde, Daniel González, Maritza Bacca, Daniel Piragauta, Catalina Vásquez (Kathiuska), Raúl Orozco (Raeioul), Ana María Guarín, Laura Henao, Lennis Orozco (Lenni Blue), Soy Pirata, José Olascoaga, Laura Guarisco (Guarisquín), Eliana Correal.
Por otro lado, en esta ocasión nos decantamos por:
- Zallary Cardona (Mariquismo Juvenil) quien a través de sus publicaciones web divulga y reivindica los derechos de la población LGTBIQ.
- Yaneth Pineda (Yapi) y Camilo Sandoval quienes realizan un trabajo más cercano a lo fantástico y la ficción cada uno con personajes que le son propios.
- Byron Alaff un autor que aúna la mirada fotográfica con la imagen dibujada.
- Ángela Pérez (Gelatina), Santiago Restrepo (Moscovisión) y Carlos Andrés Martínez (Casetera) un tríptico de autores que apuestan por la tira cómica y la autopublicación.
- Francisco Peláez (Carnícula) un historietista de aguda crítica y humor grotesco que no duda en desenvainar su pluma.
- Ana López (Cabizbaja) autora con una potencia gráfica que se adapta con rapidez y facilidad para narrar emociones y aflicciones íntimas.
Estas entrevistas agrupan un puñado de autores que buscan su propia definición del cómic y su manera de narrar la vida. En ellos es evidente, no solo la preocupación y reflexión constante sobre su quehacer, sino además puntos en común que sirven para mapear una suerte de estado de la cuestión cuando de hablar de cómic en Medellín se trata. Resuena, por ejemplo, una relación más íntima con el dibujo, en algunos casos desde la niñez y en otros como una reconciliación tardía; así como una queja por los escasos espacios para el cómic en una etapa inicial de su formación como historietistas, a la vez hace eco un anhelo por mayores mecanismos y plataformas de divulgación de sus trabajos y de visibilización de colegas, este ejercicio es entonces también una invitación a los autores emergentes a conocerse, y dialogar con su obra y sus lecturas.
Ante sus pupilas, queridos lectores quedan nuestros nueve autores seleccionados, esperamos hayamos sabido brindar un bocado más de su obra, esta vez a través de sus palabras.
Revista Blast