Nacido el 3 de julio de 1883 en Praga, Imperio austrohúngaro, Franz Kafka es uno de los escritores más influyentes del siglo XX. Su particular estilo aportó al relato moderno la parábola o relato simbólico. En sus extrañas y muy sugestivas historias un hombre puede despertarse una mañana transformado en un monstruoso insecto o podemos asistir a la narración de un hombre que no siente hambre alguna y se presenta frente a sus espectadores quienes no pueden parar de asombrarse ante tal personaje. En el presente artículo menciono tres obras gráficas contemporáneas conectadas directamente con el cómic que abordan obra y vida de Kafka.
KAFKA por David Zane Mairowitz y Robert Crumb. Ediciones la Cúpula.
Esta es una obra construida como un híbrido entre cómic, libro ilustrado y biografía. Pretende abordar la vida de Kafka, su entorno hogareño y el transcurrir de sus días en su Praga natal. El libro hace especial énfasis en sus orígenes judíos, en lo que supone para un creador, un hombre sensible como el de habla alemana, haberse criado bajo el imperio de los Habsburgo a finales del siglo XX. También el libro hace hincapié y nos muestra cómo Kafka es heredero de una rica tradición de narraciones e historias sobre rabinos con poderes mágicos e historias del folklore judío, como la del Golem, historias que muy probablemente afectaron su mente y sensibilidad de escritor. El dibujo de Robert Crumb es más que efectivo con su obsesiva y muy expresiva habilidad para el detalle, mostrándonos por ejemplo al padre de Kafka, Hermann Kafka, tiránico y autoritario que inspiraría a Franz a escribir su famosa Carta al Padre. En el libro también están presentes mujeres con las que Kafka mantuvo correspondencia y amó, a su muy singular manera, pues Kafka, según nos cuenta el libro, se sentía muy mal con respecto a su cuerpo y se culpabilizaba por sus impulsos sexuales. Aparecen entonces damas como Felice Bauer, Grete Bloch y Milena Jesenka, quienes serán refugio y oasis para su atormentado espíritu. Fragmentos de los relatos La Madriguera, La Metamorfosis, El Proceso y El Castillo entre otros, son retratados aquí maravillosamente en forma de cómics, en los cuales podemos apreciar la buena labor de documentación de Mairowitz y Crumb sobre el autor. El resultado es una obra muy especial que acercará a los estudiosos de la obra de Kafka y que muy probablemente a los que apenas iniciando lecturas de su literatura. Hay que anotar que Mairowitz es un escritor muy interesado en divulgar la obra Kafkiana por medio del cómic. Otras obras suyas son las novelas gráficas El Proceso, con la dibujante francesa Chantal Montellier y El Castillo con el dibujante checo Jaromir 99.
La metamorfosis de Franz Kafka. Adaptado por Peter Kuper. Astiberri Ediciones.
En la introducción a esta novela gráfica, el historietista Peter Kuper nos habla del legendario autor de historietas Winsor McCay, creador entre otras cosas, de Little Nemo, haciendo una breve exposición de los mundos surreales que aparecían en sus historietas. Citando otra historieta de McCay, Dreams of a Rarebit Fiend, Kuper hace un paralelo creativo con Kafka. Según Kuper, a ambos autores los une «el genio de describir la ansiosa intersección donde se encuentran realidad y sueño». En este cómic, el fuerte estilo expresionista de contrastados blancos y negros, Kuper nos muestra su amor por este relato donde vemos a Gregorio Samsa desplazarse sumergido en la pesadilla de verse transformado en repulsivo insecto. Samsa con su transformación, con su metamorfosis, afectará a su familia y el confort que hasta ese momento reinaba en su hogar. Vemos además que el planteamiento de Kuper es acertado al comparar a dos artistas como McCay y Kafka. Ambos creadores nos lanzan a través del vértigo de la cotidianidad y nos funden con la más electrizante de las fantasías, con las más demoledoras de las pesadillas en este caso. Kuper es un virtuoso del dibujo y la composición de las viñetas, y a través de las páginas de este cómic podemos ver cómo juega con el viñetaje y el texto para hacernos sentir la opresión y la angustia del personaje. El marcado uso del negro en los dibujos recrea la pesadumbre que persigue a Gregorio Samsa hasta el final de sus días, ahogado en su propia habitación. Es notable la elección de la línea de dibujo para este trabajo que Kuper utiliza, el cual emplea en su otra obra sobre el universo de Kafka, la cual menciono a continuación.
Kafkiana. Relatos de Franz Kafka. Por Peter Kuper. Sexto piso.
Lo que Kuper había logrado con su versión de La Metamorfosis, aquí lo mejora, lo supera con creces. En la forma de catorce icónicos relatos kafkianos hechos cómic. Kuper, que es un autor sumamente versátil y ha desarrollado su obra entre diarios de viajes y diversas novelas gráficas, aquí continúa con su línea inspirada en grabados de una estética similar a Lynd Ward o Frans Masereel, dando como resultado un acabado opaco y asfixiante. Aquí están los grandes temas de Kafka esparcidos para despertar interés en su obra literaria: los conflictos con el padre, el existencialismo, la brutalidad física y psicológica, la culpa y el absurdo, la burocracia y la transformación espiritual. Un sentido del humor negro y seco atraviesa todas las páginas de esta obra donde Kuper sigue realizando atrevidas y violentas composiciones de página y el diseño de los textos. Se destacan por su fuerza y expresividad relatos como:¡Renuncia!, El Buitre, El Puente y La Madriguera, entre otros. Algo que es importante anotar es cómo Kuper logra que estos relatos se sientan de gran actualidad. El autor nos sugiere en el prólogo que nuestro mundo es cada vez más kafkiano y muy probablemente al leerlos tengamos que darle la razón. Cosas como el peso de la burocracia, el absurdo en los elementos más cotidianos de nuestra vida y la angustia de nuestros días tal vez parecen susurrarnos al oído que Franz Kafka, aquel escritor de la oscura Praga y sus laberínticos callejones fue el gran profeta y visionario de nuestros tiempos.
